¿Alguna vez escucharon decir al Dr. House (el de la serie de TV) que “la gente no cambia”? -Yo creo que tiene razón… La gente no cambia, no puede… No puede porque tiene arraigado en su “ser” una esencia sui géneris, que desde antes de nacer ya trae cargando y se concreta en los primeros años de la infancia.

Por ejemplo: Una persona que nació y creció en una país que habla español, adquiere o desarrolla el acento de esa localidad. Y al acento es difícil de cambiar u ocultar ¿no? Más aún, esta persona se va a Japón y aprende el idioma, pero seguramente difícilmente podrá igualarse (el acento)  al de la localidad donde esté. Lo mismo pasa cuando un japonés viene a un país que habla español, aprende el idioma, pero su acento será japonés.

¿Qué quiero decir con esto? Que hay algo que en esencia no cambia, como bien lo dijo House.  Lo que pasa es que solemos ‘generalizar’ los conceptos, las frases y cualquier aprendizaje a todos los ámbitos de la vida, sin embargo lo más adecuado, desde mi punto de vista, sería ser ‘circunstanciales o situacionales’.
Ahora bien ¿entonces siempre seremos los mismos condenados a un destino inevitable? No, por supuesto que no (otra vez las generalizaciones).  Hay cosas que no están bajo tu control y otras que sí. A estas últimas hay que enfocarnos si queremos lograr nuestros objetivos.

Lo que no estuvo o está bajo tu control pueden ser: tu temperamento, tu genética, tu historia, alguna enfermedad o discapacidad, el estatus social y económico de tus padres cuando tú naciste, y todo aquello que ocurrió en tu infancia y de lo cual no eres responsable.

Lo que está bajo tu control ahora pueden ser: tu carácter, tus pensamientos, tus palabras, tus emociones, tus acciones. Cada decisión que tomas está bajo tu control aunque a veces la delegues al inconsciente. Todo tu Sistema de Creencias y Valores está bajo tu control aunque no sepas cómo hacer modificaciones en él. Desarrollar nuevas habilidades, recursos, aprendizajes, está bajo tu control. Lograr metas y sueños está bajo tu control.

Entonces la gente no cambia… Se ACTUALIZA… Ésta es la palabra que me gusta utilizar en mis cursos y conferencias. Actualización… Cualquier modificación que hagas en tu persona de lo que está bajo tu control, es una actualización. Igual que una aplicación de tu smartphone o computadora, que constantemente se actualizan con el propósito de mejorar la versión. Ésta es la idea de nosotros: actualizar lo que está bajo nuestro control con el fin de ser una mejor versión cada vez para lograr mejores cosas cada vez.

Un señor de alrededor de 60 años me dijo en un curso que yo estaba dando -“eso déjaselo a los jóvenes, viejos como yo no cambian”.- Y tenía mucha razón (desde su Sistema de Creencias y Valores), pero desde el mío no. ¿Y desde el tuyo?

Estoy convencido de que todos podemos ser distintos, ser mejores, SER lo que queremos llegar a SER, HACER lo que queremos llegar a HACER y TENER lo que queremos llegar a TENER, con simples, pequeñas y constantes actualizaciones.

Todo es impermanente y el cambio es inevitable, así que nadie ni nada puede estar estático… Tú ¿evolucionas o ‘involucionas’?